
Empecé la Diplotamtura de Documentación hace tres años o tres cursos y la termino justo cuando ya va a desaparecer con el Plan Bolonia.
Me matriculé básicamenta por temas laborales, de reconocimientos de categorias, pero también tenía ganas de conocer la Universidad y de actualizar conocimientos.
El resultado, en cuanto a notas, ha estado muy bien. Otro asunto ha sido la actualización de conocimientos y adquisición de otros. La verdad es que visto después de tres años, la Universidad, o al menos mi carrera es decepcionante, o por lo menos muy irregular.
Los profesores en general están poco adaptados a los cambios que se están produciendo y ni siquiera siguen la actualidad. Viven en un mundo académico que se autonutre de referencias, textos y citas. Pocos profesores tienen experiencia laboral de lo que están contando, con lo cual sólo recitan teorías.
En esa irregularidad aparecen profesores magníficos que hacen las clases amenas aunque el temario sea muy árido. Profes que conocen la materia y que saben aclarar las dudas de los alumnos.
Y hay profesores lamentables y sinvergüenzas que no actualizan el temario, si es que alguno lo tiene y que no tienen problema dejar de dar clases (y no recuperarlas).
Lo que más me sorprendió es que en la supuesta era de la digitalización, tema que se machaca en la carrera, los apuntes se sigan dictando. Los campus virtuales son usados por una minoria muy minoria de los docentes.
El edificio mismo y las aulas de la facultad son imposibles para hacer un tipo de clases que no sean las magistrales "profesor dicta y el alumno escucha y anota"
Tal vez lo mejor sea la propia facultad. En plen centro de Madrid y con dimensiones pequeñas (es la segunda facultad más pequeña de la Complutense). Aunque eso no le quita la burocracia y el descontrol administrativo...
Mis compañeros (o mejor dicho compañeras, por la gran mayoría) eran o gente mayor con trabajos o gente joven rebotada del turno de mañana o de otras opciones. En general, la aptitud era bastante cómoda siguendo los caminos más sencillos, sin arriesgar, sin buscar otras lecturas de lo que se contaba en clase. Unos porque de verdad no tenían tiempo teniendo que trabajar y estudiar, y otros porque simplemente aplicaban la ley del mínimo esfuerzo.
Aunque yo tenía ventaja pues todo lo que iban contando los profesores ya lo conocía o incluso trabajaba con ello.
Y cuando todo estaba a punto de acabar, llegó Bolonia y plan para cambiar la Universidad y las carreras. Todo una farsa, pues si no se forma antes a los profesores y se cambia la actitud de los alumnos será poner patas abajo la Universidad para sacar más dinero a los estudiantes y que entren las empresas, pero sin variar lo que se enseña y cómo se enseña.
En resumen, que menos mal que lo he terminado (casi) todo a tiempo. Con las ganitas que tenía de acabar!!
Ya era horita chaval!!!!!
ResponderEliminarencima te sientes orgulloso de acabar con casi 40 tacos.... Sólo te falta haber estado en la tuna.....
En fin, ya estás entre los españoles respetables qeu tienen título universitario. Eres un número más para la estadística.
ENHORABUENA AMIGO ANTIGUO Y MAYOR.....
¡Olé y oléeee!
ResponderEliminarQuizá lo más actualizado en cuanto a lo que comentas sea la UNED que, al tener que virtualizarse, está "puesta". Claro, que no todos los profesores usaban esa posibilidad ¡ni siquiera en un medio como la UNED! Pero los tres que se comunicaban con nosotros mediante foros ofrecían una disponibilidad increíble, uno de ellos, además, con una paciencia tremenda, y una capacidad dinamizadora y motivante inmensa, que hizo que una asignatura respecto a la que, en principio, no tenía expectativa de ningún tipo, terminase entusiasmándome.
Un besazo ¡y enhorabuena!